Wanda se estrena

Siempre en la vida hay una primera vez, y no solo en el amor, y salga bien o mal las personas lo recordarán por ser la primicia de un acto o destino que se seguirá haciendo en ese derrotero que es la existencia humana.

Conciente o no de ello Wanda Fraga Sánchez, joven artista santaclareña, tendrá que decir por siempre que su exposición personal fue en la Galería Mejunje, del centro cultural homónimo, institución que desde hacía un tiempo se había fijado en su trabajo y la había invitado a mostrarlo.

Así tenemos que la expo inicial de Wanda se titula “Miniaturas frente al abismo” y está constituida por quince piezas pequeñas multitécnicas donde se mezcla la pintura, el dibujo, la artesanía y sobre todo la apropiación de objetos y símbolos con una marcada intencionalidad conceptual.

En una aproximación primera a las obras estas pueden parecer ingenuas, joviales y hasta inocentes pero mirándolas bien contienen un discurso pensado con anterioridad y hasta enriquecido durante la realización artística en la que se refiere a sus vivencias personales y las de su generación, la de ahora.

Obras como “El discurso que elegí”, “Virginidad” y “ Rehén” resultan interesantes y denotativas de lo que anda en la cabeza y en las musas que inauguran a Wanda.