Ernan, un músico incansable

Aún sin sacudirse el polvo de los muchos lauros conseguidos en el reciente Festival Cubadisco, Ernán López Nussa se echó el piano en la maleta y junto a sus dos músicos acompañantes decidió mostrarse en las tres capitales de la región central de Cuba.

Así se presentó primero en Cienfuegos, después en Santa Clara y por último en Sancti Spiritus, ciudad que acaba de cumplir medio milenio siendo la cuarta villa  fundada por los españoles en la mayor de Las Antillas.

En el Teatro La Caridad de Santa Clara, López Nussa mostró la mayor parte de su disco “Sacrilegio” producido por el sello Colibrí con el acaba de obtener el Gran Premio Cubadisco y otros reconocimientos más que lo convirtieron en el acontecimiento de la más reciente fiesta discográfica cubana. En el álbum Nussa navega por las dos corrientes de su vida musical, la música académica y la popular entendida como el jazz.

Ellos son un trío que juega en escena a “improvisar” porque el decir de líder “enseguida descubrí que el mayor desarrollo en el jazz proviene de la improvisación y que la música clásica, la romántica, barroco u otras etapas fueron fruto de las improvisaciones de los grandes maestros del arte musical, o sea que estamos hablando de un lenguaje común”

En el trío lo acompañan el joven contrabajista Gastón Joya, un auténtico talento del instrumento y el experimentado y ranqueado baterista Enrique Plá, Enriquito y ha dedicado esta mini gira al centenario del gran intelectual y artista cubano Samuel Feijoo.

Ahora trabaja en la conformación de dos discos en unión de otros miembros de su familia.