Concluyó Festival de Teatro de Pequeño Formato

Tardes y noches largas  de buen teatro cubano caracterizaron las siete jornadas que duró la vigésimo primera edición del Festival Nacional de Teatro que concluyó en el Centro Cultural El Mejunje de Santa Clara.

Es uno de los eventos escénicos más tradicionales del país y desde hace tres años no es competitivo con el objetivo de abrir la capacidad de convocatoria y que vengan al certamen todo tipo de obra sin otra pretensión que no sea la de mostrar y compartir lo que se hace.

 Asistieron grupos de la Habana. Matanzas, Pinar del Rio, Sancti Spiritus y varios de Villa Clara, la provincia sede, los que se presentaron en los dos escenarios del propio Mejunje, en la Sala del Guiñol de Santa Clara, en el Teatro La Caridad y en seis municipios villaclareños.

“Yo creo que es el festival más humano que se puede hacer en Cuba”, dice Ramón Silvero, director del Mejunje. “Los artistas vienen a encontrarse, a aprender unos de otros, a intercambiar lo que hacen y como lo hacen y también a comunicarse en directo con el público que es muy participativo y que en muchas ocasiones conocen ya a los teatristas”

La jornada del cierre incluyó la presentación de las obras “Fabulario inconcluso” del grupo El Taller y “ Burundanga”  a cargo de los Grupos Okantomí y Las Estaciones bajo la dirección artística de Rubén Darío Salazar.